- La consulta ciudadana y el análisis técnico: claves para proteger la costa de Gran Canaria
- La Universidad de Cantabria lidera sesiones paralelas con vecinos y técnicos para diseñar soluciones eficaces frente al aumento del nivel del mar.
4 de diciembre de 2024 – LIFE COSTAdapta, el proyecto europeo que busca adaptar la costa de Gran Canaria al aumento del nivel del mar mediante una innovadora metodología de arrecifes-charcos de marea (Tidal pool-reef), sigue avanzando gracias a la participación activa de la comunidad local y expertos del sector.
Entre el 27 y el 29 de noviembre, la Universidad de Cantabria, organizó las Sesiones de Consulta a Residentes en San Felipe. Durante estas sesiones, los vecinos compartieron sus inquietudes, sugerencias y preocupaciones, asegurando que sus voces fueran escuchadas en el proceso de adaptación.
El 2 de diciembre, se celebraron las Sesiones Técnicas con instituciones y expertos, en las que se debatieron las mejores soluciones para la adaptación costera. En este evento, Raúl García Brink, del Cabildo de Gran Canaria, y los representantes del equipo de la Universidad de Cantabria y Raley Estudios Costeros presentaron los avances del proyecto y recogieron valiosa información.
LIFE COSTAdapta es un proyecto financiado en un 60% por el Programa LIFE de la Unión Europea, con un presupuesto total de 3.409.864 € y una duración de siete años. Está coordinado por el Consejo Insular de Energía de Gran Canaria (CIEGC) y cuenta con socios como la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), INGECID, ECOncrete AQUA, la Fundación Canaria para el Reciclaje y Desarrollo Sostenible (Canarias Recicla), Raley Estudios Costeros, la Universidad de Cantabria (UC) y la Fundación Finnova. El objetivo principal es proteger las zonas costeras de Gran Canaria frente a los efectos del cambio climático, mediante soluciones innovadoras que fomenten la biodiversidad y la resiliencia ambiental, al tiempo que se mantienen las actividades económicas locales, especialmente en áreas turísticas clave como San Felipe.
La participación activa de la comunidad local es fundamental para asegurar que el proyecto no solo proteja el litoral, sino que también conserve los hábitats naturales y mantenga la estabilidad de la economía turística, tan importante para la región.